Es un hecho que la tecnología ha cambiado el modus vivendi de muchas generaciones en muy poco tiempo, por ejemplo, hace 15 años, los celulares en Colombia eran un lujo que no muchos podían darse, lo que causaba algunos inconvenientes al tratar de concretar una cita con alguien que no pudo llegar a la hora indicada ¿Qué pudo haber pasado? ¿Hubo una confusión en la hora o lugar? ¿Vendrá en camino? Eran incógnitas que sólo podíamos resolver dirigiéndonos a una cabina de llamadas y contactar al teléfono de su casa u oficina, corriendo el riesgo de que la persona llegará justo en el momento que no estamos en el lugar acordado. Todos sabemos que ahora es muy diferente, tenemos la posibilidad de contactar a una persona en cualquier momento sin depender del lugar donde nos encontremos. Situaciones similares a la descrita anteriormente, han ocurrido en ámbitos más empresariales, pasando de diligenciar una encuesta en papel a registrarla en cualquier dispositivo móvil conectado a Internet, reemplazando totalmente una contabilidad hecha en libros de Excel para llevar un seguimiento más acertado desde plataformas almacenadas en la nube y que pueden ser accedidos desde cualquier lugar del mundo… pero es aquí donde debemos empezar a analizar… ¿͞Desde cualquier lugar del mundo͟? ¿Es apropiado que nuestra información esté tan disponible? Desde que llegamos a esta era de transformación digital, la información se ha convertido en uno de los activos más importantes para las compañías y un asunto de especial atención para cualquier persona que tenga contacto con el mundo virtual, es por eso que el tema de seguridad informática debe ser una medida de implementación obligatoria; para ello existen muchas normas y estándares que exigen un manejo adecuado de los datos a través del uso sistemas de información que garantizan confiabilidad, integridad y la disponibilidad a todas nuestras transacciones electrónicas. Una de las normas más conocidas es la ISO 27001, que contempla todo lo relacionado a la seguridad informática en las empresas y puede ser implementada y certificada en cualquier tipo de organización, con o sin fines de lucro, privada o pública, pequeña o grande. Esta norma se ha convertido en la principal norma a nivel mundial para la seguridad de la información y muchas empresas han certificado su cumplimiento. En específico, las «Normas ISO/IEC27000» es el conjunto de estándares de seguridad que buscan dar un marco teórico para la gestión de la seguridad informática. En cuanto a la seguridad informática de personas naturales, contamos con una serie de normas que nos brindan el derecho de proteger nuestras creaciones intelectuales, nuestros datos personales, nuestras transacciones electrónicas e incluso dan valor a nuestras firmas digitales. Así pues, conocemos la ley 1403 de 2010 que condenan el plagio de obras intelectuales, la ley 1581 de 2012, también conocida como habeas data, que obliga a las compañíasa gestionar un tratamiento adecuado a los datos personales y así mismo a establecer canales de atención para que los titulares puedan solicitar la modificación, actualización o eliminación de su información. Igualmente, existe la Ley de Comercio Electrónico también conocida como la ley 527 de 1999, la cual autoriza y brinda seguridad a las transacciones electrónicas a través del uso y el acceso a los mensajes de datos (incluyendo firmas digitales); esta ley otorga reconocimiento jurídico a los documentos electrónicos (por ejemplo, elaboración, revisión y aprobación de Documentos Controlados) y da valor a las firmas digitales como si fuesen manuscritas. Es así que, tenemos a nuestra disposición una gran cantidad de normas, gracias a las cuales podemos proteger nuestra información, ya sea personal, comercial, intelectual, etc. Es nuestra responsabilidad conocer y exigir los derechos que nos brinda la legislación Colombiana y mundial con respecto al tema expuesto. Tatiana Garzón |